lunes, septiembre 28, 2009

Precalentamiento

Hoy toca hacer inventario en AKI Málaga, mañana será Mijas. Mientras tanto, a la espera de que den las 22h (hora de inicio) aquí ando, con un resfriado brutal que me impidió ver el sábado a Laydown Cats en el Whiskers. Como siempre que me resfrío me dan ganas de quedarme en casa acurrucado entre las sábanas mientras veo alguna peli y/o alguna serie. Mi especialidad para días así son las miniseries o las pelis de ciencia ficción, de hecho he dejado a medias La amenaza de Andrómeda porque mi hermana está tan mal que ha tenido que ir a que la vea el médico de guardia.

La verdad es que me espera un invierno puñetero, preveo cinco meses de toses y mucosidades ininterrumpidas como cada año. ¿Alergia a algo? Pues a nada en especial y a casi todo en general (polvo, ácaros, algunas clases de polen, la programación de Tele5...) pero nada heavy en el fondo.

Hoy entro a las 22h y saldré entre las 3h y las 4h. Desde el Pryca Los Patios (¿qué será eso del Carrefour?) hasta mi casa hay algo menos de una hora, y claro, en un principio volver andandito no es un gran problema, pero el martes tendré que buscarme la vida de algún modo. Vamos, que de Mijas a casita hay un pequeño tirón (6 horas dicen por ahí). El viernes hice un par de coleguitas que igual me encuentran un modo alternativo de llegar a Málaga. Espero que no tenga nada que ver con el LHC.

viernes, septiembre 25, 2009

Autorretrato

si me encierro, ven a verme; un vis a vis...
caí preso dentro de mí, dentro, muy dentro de mí
si me escapo, ve a buscarme cualquier día
donde quede alguna flor... donde no haya policía

jueves, septiembre 24, 2009

6996

Hoy es (si las cuentas no me fallan) el día número 10.495 de mi existencia, lo cual hace que grosso modo haya vivido unos 6.996 días efectivos si descontamos 8 horas de sueño al día que supondrían 3.499 días.

Me flipan los números, eso es vox populi, ¿pero los números relativos a mí? Dios, ¡¡es delicioso!!

lunes, septiembre 21, 2009

Vuelta a la red (stuck in this stuff)



No se me ocurría una forma mejor que empezar colgando un vídeo de los RHCP haciendo un cover de The Velvet Underground.

jueves, septiembre 17, 2009

Realidades

Estoy harto de que me vendan la moto. Puedo comprender que cada uno haga proselitismo su propia visión del mundo, pero conmigo no, por favor. Me esfuerzo cada día por tener una visión lo más amplia posible de la realidad, y presto oídos a las opiniones de mis congéneres, pero eso no hace que esté de acuerdo con ellos y, de alguna manera, me molesta que a veces pueda dar la impresión de que sí pienso lo mismo. Paso a citar algunos ejemplos de tales choques de opiniones, las más comunes, las que más se repiten, las que más me tocan la moral...

Tengo un elevado número de amigas y no dudo al decir que ¡no me quiero acostar con todas! A mí me parece algo muy natural, claro que hay alguna que otra que si la pillara... pero no quita que haya otras con las que ni lo he imaginado. Los (y las) más escépticos dirán que esas no me atraen, no son atractivas y un bla largo como un día sin pan, pero nada más lejos de la realidad. Lo que ocurre es que hay mujeres con las que comparto una serie de espacios en mi vida que las convierte en amigas y las trato como tales. ¿Es entonces el género incompatible con la amistad? Si fuera así sólo podría tener relaciones de amistad con hombres. Me parece una chorrada de mono.

Y de aquí salto a otro punto. ¿Qué es eso que escucho tanto de “no salgo con mis amigos”? Las relaciones sociales que mantenemos evolucionan, eso es innegable, ¿qué hay pues de extraño en dos amigos que deciden llevar su relación a otro plano? No voy a entrar a discutir los pros y los contras, que son tantos como hacerlo con una completa desconocida, pero lo que no comparto es esa actitud tan posesiva con la que la gente trata la amistad. Me da a mí que es una cuestión de falta de confianza en uno mismo para llevar adelante una relación fructífera y, en caso contrario, hacer nuevas amistades. ¿Efectos colaterales? Comer carne de perro en Chernobyl puede tener efectos colaterales, pero con los treinta ya encima quiero creer que la gente sobrelleva esas situaciones con la maestría que da la experiencia.

A mí me gusta que mis relaciones partan de un conocimiento mutuo, no de un one-night shot, saber de antemano dónde me meto y darle a la otra persona la oportunidad de saberlo a su vez. Pero claro, si hiciera caso a los que me rodean tendría un grave problema. Por un lado debería intentar acostarme con mis amigas y por el otro, para compatibilizar, debería dejar tales amistades puesto que de ser de otro modo no cabría ni la más mínima posibilidad. ¿A dónde me llevaría eso? Seguramente a la más extrema de las misoginias y al ostracismo social respecto a las mujeres.

Como, además, me considero una persona educada y respetuosa y no me lanzo al cuello de ninguna mujer a la primera de cambio, además de que me muestro jovial y despreocupado donde otros sufren la tensión del cazador, muchas féminas piensan que soy gay. Una bonita pincelada al cuadro ¿verdad?

¿En qué se traduce todo esto?
  1. Robe conoce Chica.
  2. Robe entabla amistad con Chica.
  3. Chica piensa que Robe es un tipo majo.
  4. Chica se relaja y se muestra cómo es porque Robe no intenta meterle mano
  5. Chica deduce del punto anterior, para que su ego no resulte dañado y pensar que no es el tipo de alguien como Robe, llega a la conclusión de que Robe es gay.
  6. Con el paso del tiempo, a Robe le mola la chica.
  7. Robe empieza su campaña de acoso y derribo.
  8. Robe se encuentra el primer muro. Lo derriba con éxito y deja claro que es hetero.
  9. Robe se encuentra el segundo muro. La amistad. Si Robe tiene un gran interés y piensa que merece la pena el esfuerzo se salta el segundo muro.
  10. A estas alturas Chica conoce a Rubiales que le mete mano a la primera demostrando así una gran confianza en si mismo y empieza una relación con éste.
  11. Años más tarde Chica confiesa que Rubiales no sabía lo que quería (más allá de dos polvos por semana) y que Robe hubiera sido la mejor opción por (y esto es lo mejor) las mismas razones con las que levantó los muros.
  12. Robe llega a la conclusión de que el mundo está loco y que él pertenece a otro planeta.
En resumen, ser una mujer no impide disfrutar de mi amistad, y ser amiga mía no inmuniza contra mis lances... ¿queda claro?

miércoles, septiembre 09, 2009

Ronda

El verano ha comenzado a partir a partir de este fin de semana. En esta estrecha visión de la realidad que queda injustamente encerrada en mi cuerpo y mis sentidos estará partiendo durante días.

Me ha dejado un regalo antes, tres días en Ronda. Hospedado en casa de Vane he tenido la oportunidad de conocer esa maravillosa ciudad. Rafi me había hablado muchas veces de lo preciosa que era, pero hasta que no lo he visto con mis propios ojos no podía creerlo. Durante el viaje de ida, entre las canciones que un mp4 conectado al coche despedía se enlazaban antiguas conversaciones en las que Manu me contaba el período en el que vivió allí. Todo eso formó una base sólida sobre la que se sostendría el alud de sensaciones que me esperaba.

Sabía de antemano que teniendo a Vanessa como anfitriona aburrirse sería imposible, pero no me imaginaba que tres días pudieran dar tanto de sí.

La feria de Ronda no se distingue especialmente de la que tenemos en Málaga. Teniendo en cuenta la población y su ubicación geográfica estaba bastante animada. Una feria de día muy similar a la nuestra pero con una presencia mayor de flamenco (y derivados) y una feria nocturna en la que las atracciones atraían a pequeños y mayores. Las casetas, estructuras montadas para la ocasión, ofrecían pocas opciones a los amantes de la música. Muchísimo flamenco y una única caseta donde se podían oír los mejores éxitos de los anuncios de melodías para móviles y algún que otro clásico, pero nada de Los Rodríguez, Celtas Cortos, Rafaella Carrá o tantos otros artistas que relacionamos con la feria.

Un dato curioso es que Ronda carece de pubs como tales. Bares de copas y taperías suplen esta falta durante la feria y, al igual que aquí, muchos despliegan enormes barras para que la multitud se divierta en la calle bajo el clima seco de la montaña.

Durante el fin de semana conocí a gran parte de los amigos y familiares de Vanessa y he de decir que disfruté muchísimo con todos ellos, desde Nieves, la preciosa prima de Vane, hasta Cristina tengo-que-cerrar-todos-los-bares causa de noches insomnes de mi anfitriona. Con la compañía de Melanie durante las salidas y las delicias culinarias de Ana, la madre de las contradicciones, parecía estar en casa y que hubiera vivido desde siempre allí.

Interminables conversaciones poblaron las 72 horas. Las relaciones de pareja, la amistad, el sexo, los años de instituto, la política local, la historia de Ronda, la economía mundial, el sistema capitalista y la atomización de las masas fueron temas que llenaron los días con un color intenso.

Desde el punto de vista artístico, Ronda con su Tajo, su Casa del Rey Moro y tantos, tantísimos lugares por visitar, se crece ante otros lugares cuya única distinción parece ser la calidad del vino. Puedo mostraros decenas de fotos, pero no es imposible compartir la sensación que produce alzar la vista y contemplar estos lugares.

Me gustaría poder volcar cuanto ha sido este viaje para mí en esta entrada, pero las palabras, como suele suceder, se quedan cortas, las sensaciones parecen vacías cuando el teclado las convierte en texto y los sentimientos pierden toda su fuerza al formarse en nombres, verbos y adjetivos.

Si no habéis estado ya, visitad Ronda y comprenderéis de qué hablo.