miércoles, marzo 26, 2008

L'amour en fuite, capítulo primero

El hielo en el vaso parecía no querer derretirse nunca. ¿Cuánto tiempo llevaba allí? La verdad es que no podía recordarlo, hacía ya un buen rato que el camarero había advertido que hoy yo no estaba dispuesto a darle conversación y juraría que esos tipos de la mesa de billar estaban aún jugando la misma partida que cuando entré.

Pero sí lo sabía.

Sabía cuánto tiempo llevaba allí porque tan sólo necesitaba mirar el reloj. Era la tercera vez que me pasaba por aquel antro, la tercera desde que la vi aquella tarde, caminando por la acera. Llovía como si fuera el nuevo diluvio universal, apenas podía ver nada, y los limpiaparabrisas no ayudaban mucho. Con el semáforo en rojo esperaba para volver a casa, impaciente, queriendo deshacerme de aquel olor que me perseguía desde el trabajo, cuando ella cruzó.

Era morena, tenía una larga melena negra como la noche que envolvía la ciudad, su paso era firme, decidido, alguien dijo un nombre en voz alta, ella se volvió pero quien fuera no se dirigía a ella, aunque eso fue suficiente para ver ese rostro suave a la vez que endurecido ¿quizás por una vida que no había cumplido con su parte? No era la primera cara en la que reconocía aquellas marcas que dejan las decepciones, pero su expresión me dejó sin palabras… no pude pensar en nada que definiera mejor la palabra “dulce”.

El resto de conductores comenzaron su conocida armonía del claxon para indicarme, amablemente, que el semáforo estaba en verde. No lo pensé, giré en la siguiente esquina y afortunadamente conseguí aparcar el coche. Salí corriendo como un chiquillo a la hora del recreo, la lluvia parecía que amainaba, pero eso no era suficiente para encontrarla. Vagué durante una hora o así hasta que, cansado y maldiciendo mi suerte, entré en el primer bar que encontré.

No lo podía creer. Ella estaba allí, alta, imponente desde el escenario, cantando un soul como si nadie antes hubiera cantado soul. Ella podía. El resto de los espectadores lo sabían. Esa voz hechizaba, no era de este mundo, y esos ojos no podían ser reales, esa mirada...

Han pasado tres semanas. En breve debería comenzar el espectáculo.

6 comentarios:

  1. ¿Pero qué coño?? O_o

    A ver que estas "pariendo" Robe, miedo me das...

    Pd.:Adelante, cargad!!

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  2. Show must go oooooooooooonnnnnnnn!!!!

    hala, a escribir, que quiero leer la historia.

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  3. Bueno, veamos a donde nos lleva esto...

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  4. Ya no hay marcha atrás......tus fans esperan más carne en el menú.

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  5. No esperaba tener un buen recibimiento, tampoco tener uno malo... en realidad no esperaba nada. Publicar esto es un favor que me hago a mí mismo, sacando así la parte más introvertida que tengo y exponiéndola a la vista de los demás.

    Es un placer contar con vosotros, pero no espereis que escriba algo pensando en no decepcionaros, porque lo haré sólo para no decepcionarme a mí.

    Un abrazo afectuoso,

    Robe.

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  6. "...porque lo haré sólo para no decepcionarme a mí" nininí, nininí, ni ni ní.

    Engaaa, eres un bloggero como tantos otros que murió de hipóxia cuando intentó subir hasta lo alto de su ego para suicidarse, así que no pretendas colarnos lo de la integridad y blablabla.

    Al margen de todo... la morena esta... muy dulce y tal pero... está wenorra? :P

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