Se despertó mucho antes que él, seguía durmiendo junto a ella. Sabía que se había levantado hacía sólo una hora, no lo escuchó, pero sintió su vacío junto a ella. No quiso subir la persiana, aún era temprano.
Cuando salió de la ducha decidió preparar un café, le parecía una estupenda idea compartir eso con él, un simple café, un acto tan cotidiano... No podía recordar cuándo había sido la última vez que había dejado que alguien pasara la noche entera con ella, que alguien viera su interior, que había besado con sinceridad, es más, ahora que lo pensaba, no era capaz de recordar el último beso que le habían dado. Él había borrado todos esos recuerdos, había llegado como una brisa fresca en pleno verano, había alumbrado su vida como un sol de invierno, y sólo lo conocía de haber hablado unas pocas veces con él. Por otra parte, se sentía plena, había compartido algo maravilloso con una persona que le parecía estupenda y que tenía intenciones de seguir adelante, además había encontrado ese trabajo como administrativa en una agencia de viajes en el centro, el sueldo era estupendo y el horario le permitiría seguir cantando por las noches.
El café le pareció poco. Vaya, sólo tenía sus cereales. Hoy quería darse el placer de desayunar esos pasteles tan ricos que había en la confitería del supermercado, pero por un momento temió que, al volver, él ya no estuviera y que todo no hubiese sido más que un lindo sueño... Pensó que, a fin de cuentas, le había devuelto la esperanza, había abierto una puerta que creía ya infranqueable.
En silencio, se vistió, se arregló un poco el pelo, le dejó una nota y bajó a comprar. La calle andaba animada y eso hizo que sonriera aún con más alegría.
Cuando volvió todo estaba desierto. Sabía, después de varios meses en aquel barrio, lo que eso significaba. Cuando ocurría algo que llamara la atención de la policía más de la mitad del vecindario se encerraba en casa y cruzaba los dedos para que no tocaran su timbre, para no escuchar las fuertes pisadas que supondrían tirar por el retrete la mercancía del mes.
Pero bueno, ya ni se molestaban en dibujar con tiza la silueta del pobre diablo, la gran mancha de sangre en el asfalto era muestra suficiente de lo que había ocurrido allí, alguna pelea de bandas o una discusión entre camellos... lo típico. Sino te metes con ellos te dejan en paz, en caso contrario, no había más que mirar al suelo.
Sacó las llaves del portal, esperó al ascensor. Cuando abrió la puerta de casa aún recordaba el sabor de sus besos, el tacto de sus dedos recorriendo su piel, el olor que desprendía, y aquella forma tan especial que tenía de abrazarla.
- ¿Jake? ¿Sigues ahí?
Sí, aun está, pero se está abrochando los cordones de los zapatos con prisa y lA da un beso y dice saliendo por la puerta que no le da tiempo a tomar eso tan rico que ha traído, que lo siente que la compensará.
ResponderEliminarElla se sienta, y empieza a comer como una descosida...para...y se echa a llorar.
Esto... pero el tío sa muerto o no?
ResponderEliminarSi leeis de nuevo el capítulo 4, vereis que cuando Jake se despierta encuentra una nota junto a él. El capítulo 5 iría, cronológicamente hablando, antes del 4.
ResponderEliminarVale que a veces quiera crear cierta confusión, pero que cuando eso suceda sea porque lo busque, ¡no porque os hagais un lío!
Vale, él muere y ella, que no lo sabe, se va a atiborrar de dulces pensando que luego podrá quemar unas cuantas calorías en su alcoba...
ResponderEliminarJoder Robe, me reitero. Eres cruel con tus personajes.
PD.: Y hablando de Alcoba, ¿ande andará Juan Alcoba? Si estás ahí en las sombras... SAL! MANIFIESTATE! MEDIEVOOOOOOOO!
Ten en cuenta que esto es un relato serializado, sin un ritmo de publicación fijo...Mucho esperas si quieres que la gente se acuerde de lo que pusiste la última vez!
ResponderEliminarAtrevete-te Robe, autolinkeate...
Ok, lo tengo en cuenta para la próxima. Aunque para eso está el archivo del blog, la etiqueta Historias...
ResponderEliminarK tal? Como te dije anoche kria hacer algún comentario... "poetico", pero la cosa está cortita (tengo delante los apuntes...horror!!). Así que como mi inspiración está ausente me limitaré a decirte que, en estos momentos especiales para ti, que "siempre para adelante"
ResponderEliminarEl futuro empieza cada mañana al levantarse-->Miles Davis
So long, Robe!!
¿Jugando al despiste? Jejeje, genial, poco a poco le pierdes el miedo a comentar, genial. Cualquier día te veo con un blog propio, algo así como "Aventura y desventuras del cine polaco en tierra comanche", obviamente estaría en versión original subtitulado...
ResponderEliminarUn abrazo.
Genial dos veces en dos frases seguidas?
ResponderEliminarGolpe de remo!
Bien merecido lo tengo. Joder, no me dí cuenta... :(
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